Cómo construir una pila con una patata cocida, barato y ecológico

pila de patataHace muchísimo tiempo hablábamos de cómo poder construir un altavoz con una patata frita. Ahora según ha publicado la Hebrew University de Jerusalén parece que una pila construida a partir de patatas cocidas podría proporcionar energía de bajo coste. Algo muy importante en países en vías de desarrollo.

La pila de patatas produce una energía entre 5 y 50 veces más barata que las pilas disponibles en el mercado. Producir una energía de manera tan sencilla podría ser muy beneficioso para millones de personas llevando luz y por ende comunicación a zonas que actualmente carecen de infraestructura eléctrica.

Una lámpara alimentada con la energía producida por patatas es por lo menos seis veces más económica que una lámpara de queroseno. De hecho, si la patata se hierve antes de su uso en la electrólisis, la electricidad producida, es hasta 10 veces superior a la resultante de una patata cruda y permite que la batería permanezca activa durante días e incluso semanas.

El experimento de la patata lo podemos llevar a cabo en casa. Una batería se basa en el principio de que la corriente pasa entre dos metales sumergidos en una solución especial. Una batería natural se puede fabricar con frutas o verduras como limones o aceitunas. Lo necesario es una buena cantidad de zumo que permita el paso de la corriente. El vegetal más apropiado para esto, la patata.

Ingredientes de la receta

Una patata, una tira de zinc, una tira de cobre, alambres de cobre para la conexión y un voltímetro. Las tiras de cobre y zinc actúan como electrodos y ambas las tenemos que enchufar a nuestra patata, colocadas una junta a la otra, pero de modo que no se toquen. Luego, conectaremos el voltímetro a la patata y observaremos algo de tensión. La energía producida a partir de una patata puede ser comparable a la de una pila de 1,2 voltios.

Si no funciona, simplemente comprobar las conexiones y que estén hechas en el orden correcto y ya está, podemos probar si nuestra “pila” es capaz de alimentar el reloj de nuestra mesilla de noche.

Un limón también se puede transformar en una interesante batería. La diseñadora holandesa Cygalle Shapiro ha creado una lámpara LED alimentada por zumo de tomate. El objetivo de este proyecto en concreto no es producir energía verde, sino mostrar cuántos recursos naturales se necesitan para obtener una pequeña cantidad de energía y por lo tanto aumentar la concienciación sobre el desperdicio de recursos. La lámpara necesita una cantidad enorme de tomates para funcionar.

Visto en lavanguardia.com

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