Hacer un preservativo que realmente la gente quiera usar podría ahorrar millones de vidas.Mucha gente no se siente bien usando preservativos, aunque éstos les puedan salvar de contraer enfermedades de transmisión sexual como el SIDA. Para ser justos, el “condón” sigue siendo algo muy primitivo. El uso de látex fue una gran innovación, pero esto fue ya hace décadas. Ahora estamos en el 2013. Los científicos están desarrollando capas de invisibilidad, coches que se conducen solos, tenemos un telescopio gigante capaz de ver el pasado y hasta un robot tomando muestras de rocas en Marte.
Pero, ¿y el condón? Ha habido intentos de modernizarlo, pero ninguno ha llegado a su producción en masa. Esto significa, que nuestra mejor herramienta para combatir la propagación de enfermedades de transmisión sexual, sigue siendo una especie de guante de goma.
Se trata de un producto fácil de transportar, resistente, eficaz cuando se utiliza correctamente y fácil de conseguir y usar. Pero si nadie quiere usarlo, todo esto no importa.
Así que la Fundación Gates ha establecido una propuesta: idear un condón verdaderamente next-generation, un icondón o un smartcondón, tal y como el iPhone causó una revolución . Eso significa un condón más tentador de usar, que incluso aumentara el placer, más sencillo aún de usar, con un envoltorio más apetecible o con cualquier otra función que a la gente realmente le invite a usar un condón.
El premio no es nada despreciable, 100.000$ ofrecidos a través del Grand Challenges in Global Health program.
Visto en Popular Science.
