El comercio electrónico ha movido España durante el 2015 la asombrosa cifra récord de 20.000 millones de euros. Un 20% más respecto del ejercicio anterior. Con esta cifra, España se sitúa en el cuarto puesto europeo en término de e-commerce por detrás del Reino Unido, Alemania y Francia. No obstante España aún está muy alejada de los países que le preceden.
Por sectores, el de viajes y turismo concentra el mayor volumen de negocio, con el 45% del total. Uno de los sectores que más está creciendo es el de la alimentación gracias a la aparición de nuevos servicios, como hacer la compra y llevarla en unas horas a donde el comprador desee o la posibilidad de eliminar intermediarios.
En un pasado muy reciente han ayudado al auge del comercio electrónico la proliferación de los “clubes de ventas”, tipo Privalia o Vente-Privée, así como la apuesta de grupos como Inditex (Zara) por vender a través de internet.
La irrupción de Amazon, ha marcado un antes y un después en el mercado electrónico, lo que ha obligado a otros operadores a entender que internet es algo estratégico y no solo un canal de ventas más.
Poco a poco, también cobrarán más protagonismo las grandes empresas chinas como Alibabá.
Cada vez compramos más a golpe de ratón. Las ofertas y la rapidez a la hora de recibir los productos hacen que este tipo de compras aumenten en popularidad, aunque de momento el perfil de los compradores online es de mujeres entre 35 y 45 años de clase media alta y con estudios.
La venta de dispositivos electrónicos, memorias flash, smartphones, cámaras digitales y tablets también ha encontrado un importante auge. El éxito en parte se debe a que los compradores buscan precios asequibles en marcas consolidadas en el mercado.
Un ejemplo interesante de tienda online es MyTelecom, donde podemos encontrar grandes precios en productos electrónicos a unos precios verdaderamente extremos.