Un equipo de investigación del Kamitani Lab de la Universidad de Kyoto (Japón), ha conseguido un software que según parece es capaz de reproducir en pantalla lo que estamos pensando.
La repercusión que un avance de este tipo podría llegar a tener en nuestras vidas es enorme. Según un artículo publicado en la revista Science, el punto más complicado parece haber sido crear un algoritmo capaz de interpretar y sobre todo de reproducir con exactitud las imágenes que registra el cerebro de una persona después de verlas en una pantalla. A su vez, el algoritmo también es capaz de interpretar y reproducir lo que una persona recuerda de las imágenes que ha visto con anterioridad.
Un algoritmo capaz de interpretar lo que pensamos
Hasta la fecha los intentos por desarrollar un algoritmo capaz de realizar este trabajo eran bastante limitados. La diferencia entre el trabajo realizado y el punto hasta el que varios equipos habían llegado radica en que esta red neuronal no solo ha aumentado la percepción y reproducción informática de las imágenes mentales sino que también ha permitido que se puedan interpretar y replicar formas que sólo estaban en la imaginación de una persona.
Tal y como ha sido descrito, para ayudar con el entrenamiento y desarrollo de la red neuronal, los investigadores que conformaron el equipo decidieron utilizar a tres voluntarios con visión normal a los que les iban a presentar diferentes fotografías pertenecientes a categorías tales como naturaleza, letras y formas geométricas.
Al contemplar imágenes se genera una actividad neuronal
El objetivo del experimento era que al contemplar las imágenes en la corteza cerebral de cada uno de estos voluntarios se iba a generar una actividad que sería transmitida y analizada en la red neuronal. Para que esta pudiese desarrollarse y aprender de las diferentes reacciones los voluntarios tuvieron que observar más de 1.000 imágenes varias veces. Entre las imágenes, para que podamos hacernos una mejor idea, podíamos encontrar un pez, formas de colores simples o un avión.
Para registrar la actividad cerebral de cada uno de los voluntarios los investigadores hicieron uso de técnicas como la resonancia magnética funcional, la misma que mide el flujo de sangre presente en ciertas regiones del cerebro y desvela así la actividad neuronal. Con cada una de las imágenes se analizaba la actividad cerebral del individuo. Gracias a este enorme trabajo se consiguió que finalmente el ordenador tuviese capacidad suficiente para conseguir reconstruir una imagen a partir de la actividad cerebral que presentaba en un momento dado una persona cualquiera.
Las imágenes consiguen gran realismo
La reconstrucción de una imagen no es algo instantáneo sino que la red neuronal va perfilando la misma a lo largo de unas 200 rondas ya que literalmente se debe comparar la percepción que recibe de la reacción que tiene un individuo ante la imagen que se le ha presentado o recuerda con las que tiene almacenadas. Al final, como detalle, no solo la red neuronal consigue replicar la imagen cerebral, sino que esta adquiere más realismo gracias a un algoritmo especial que ha sido implementado adicionalmente.
