Casi se puede decir que el talón de Aquiles de los automóviles eléctricos es el tiempo empleado en la carga de sus baterías. Continuamente se está investigando en procesos que acorten el tiempo de carga.
2017 está siendo un año clave para la industria del automóvil eléctrico, entre otras razones por la expansión de la red de puntos de carga, la postura favorable de las administraciones para impulsar la infraestructura necesaria y el abaratamiento de la tecnología y las baterías.
Cada vez los vehículos eléctricos tienen más autonomía, pero precisamente el tiempo de carga de las baterías es lo que les impide competir con vehículos de motor de combustión capaces de repostar en un par de minutos.
Un grupo de científicos de la Universidad de Drexel ha descubierto un nanomaterial bautizado con el nombre de MXene que permite la carga de una batería en segundos. Se trata de una sustancia basada en una mezcla de óxido metálico y un hidrogel que crea una estructura altamente conductiva, dejando que los iones se muevan libremente dentro de la batería mientras ésta se está cargando.
Uno de los investigadores, Maria Lukatskayu, lo compara con una autopista de alta velocidad de múltiples carriles, donde todas las partes de la batería se cargan en paralelo y por lo tanto en segundos. Tanto que un coche eléctrico podría cargarse con ese sistema en un par de minutos.
El descubrimiento superaría ampliamente a los actuales Supercargadores de Tesla, los más rápidos del mercado, que tardan unos 30 minutos en cargar el 100% de la batería del vehículo.
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