Según la última filtración de Wikileaks, parece ser que las últimas técnicas de la CIA van encaminadas a infectar móviles, tablets y ordenadores para acceder a toda nuestra documentación.
Los ataques se producen gracias a vulnerabilidades en los dispositivos. Es posible infectar un móvil de manera silenciosa sin que lo sepa el dueño del teléfono y cuanto más popular sea el dispositivo más se puede llegar a pagar por el acceso.
Una vez que tomado el control del móvil no es necesario saltarse la encriptación de la que presumen los programas de mensajería para proteger las comunicaciones de punto a punto. En el informe de Wikileaks se explica que gracias a estas técnicas, una vez que se tiene seguimiento del aparato, se dispone del acceso a WhatsApp o aplicaciones de mensajería supuestamente más seguras, como Telegram, Confide o Signal, es posible.
Telegram ha emitido un comunicado donde refuerza su postura. Según la aplicación las herramientas de la CIA no se han saltado su protocolo de encriptación. La empresa recuerda que no conviene usar aparatos que ya no tengan soporte del fabricante y que conviene escoger aquellos que tengan actualizaciones durante un largo periodo de tiempo.
Bajo la premisa de todo aparato conectado es susceptible de ser espiado, la CIA ha tenido en el punto de mira cualquier punto de acceso a Internet. Si un televisor escucha órdenes, también puede escuchar conversaciones privadas. El sistema de escucha y grabación de los televisores Samsung se hizo en colaboración con el MI5 de Reino Unido.
Entre los productos afectados según Wikileaks se encuentran desde el iPhone de Apple a los móviles de Android y Microsoft, así como los televisores de Samsung. También los iPads, módems de conexión a Internet.
Las redes sociales tampoco quedan al margen de este grupo de piratas informáticos de la CIA. Wikileaks asegura que se ha llegaron a tomar el control del Twitter presidencial, pero no concreta hasta qué punto o situación.
Visto en elpais.com
