El material que consigue que no quede nada dentro de un envase

envasesUna compañía estadounidense ha desarrollado un novedoso revestimiento para que la superficie interior de los envases de ciertos productos como la mahonesa, el kétchup o la mostaza, se mantengan constantemente húmedos y resbaladizos.

La cubierta interior combina una textura sólida con un líquido para crear una “superficie impregnada de líquido”. La cubierta sólida es como una esponja microscópica, y el líquido se mantiene en su lugar gracias a las potentes fuerzas capilares. El resultado es una superficie resbaladiza permanente que le permite a los líquidos viscosos deslizarse fácilmente.

La capa interior, funciona sobre distintos tipos de materiales, desde metales y vidrios hasta plásticos y cerámicas. Para cada caso, varía su composición. Al cambiar los componentes y la estructura del revestimiento, los investigadores pueden controlar la velocidad a la que el líquido se resbala de la superficie.

La clave del problema

Aunque pueda parecer un problema menor, lo cierto es que gran parte de muchos de los productos que compramos se desperdicia. Se estima que hasta un 25% de las cremas para la piel, un 16% de los líquidos para lavar la ropa y un 15% de los condimentos se queda pegado dentro de sus recipientes.

La búsqueda de un material que repela los líquidos no es nueva. En el pasado se han presentado otras soluciones como las llamadas superficies superhidrofóbicas que repelen el agua.

Estas superficies, que replican en parte el modelo de la hoja de loto, tienen una textura con pequeñas cavidades en las que queda atrapado el aire. Cuando el agua entra en contacto con esta superficie forma pequeñas gotas que se deslizan con facilidad.

Otras aplicaciones

Si bien actualmente el campo de aplicación de este revestimiento se centra en la fabricación de envases, tiene potencial para aplicarse en otras áreas industriales.

Actualmente, las investigaciones se están centrando en torno a los revestimientos de los contenedores de gas y petróleo.

Esto no sólo permitiría reducir la cantidad de energía que se emplea para empujar estos líquidos a través de una cañería sino también reducir o eliminar las sustancias químicas que se utilizan en la limpieza de los tanques.

Visto en BBC

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