Los nuevos trajes espaciales de la NASA son parte del programa Artemis, que tiene como objetivo enviar a la primera mujer y a la primera persona de color a la Luna en 2024. Estos trajes están diseñados para proporcionar una mayor flexibilidad, seguridad y comodidad a los astronautas que explorarán la superficie lunar.
Los trajes espaciales son esenciales para la supervivencia de los astronautas en el espacio, ya que les proveen de oxígeno, presión, temperatura y protección contra la radiación y los micrometeoritos. Sin embargo, los trajes actuales que usa la NASA tienen más de 40 años de antigüedad y presentan varios problemas, como el tamaño, el peso, la movilidad y la adaptabilidad2.
Para resolver estos inconvenientes, la NASA ha desarrollado dos nuevos modelos de trajes espaciales: el Sistema de Supervivencia de la Tripulación de Orión (OCSS) y la Unidad de Movilidad Extravehicular (xEMU). Estos trajes incorporan varias innovaciones tecnológicas y ergonómicas que los hacen más adecuados para las misiones lunares y, en el futuro, marcianas3.
Un traje para situaciones de emergencia
El OCSS es el traje de color naranja que usarán los astronautas durante el lanzamiento y el regreso a la Tierra, así como en situaciones de emergencia o de alto riesgo. Este traje es más ligero y resistente que el actual, y tiene un casco con una visera transparente que mejora la visibilidad y la comunicación. Además, el OCSS tiene un sistema de enfriamiento integrado que regula la temperatura corporal y un sistema de paracaídas que se activa en caso de que el astronauta salga despedido de la cápsula4.
El xEMU es el traje de color blanco, azul y rojo que usarán los astronautas para realizar las caminatas espaciales en la Luna. Este traje es más flexible y versátil que el actual, y permite a los astronautas realizar gestos cotidianos como doblar las rodillas, inclinarse o girar la cintura. Además, el xEMU tiene un sistema de soporte vital que dura hasta ocho horas y que se puede recargar en la base lunar. El xEMU también tiene un casco con una visera transparente que se puede abrir y cerrar, y que tiene una cámara incorporada que transmite imágenes en alta definición. Asimismo, el xEMU tiene un sistema de iluminación que facilita la visión nocturna y un sistema de alerta que avisa al astronauta de posibles peligros5.
Un traje espacial adaptado para todos los públicos
Una de las principales ventajas de los nuevos trajes espaciales es que son unisex, es decir, que se pueden adaptar a diferentes tallas y formas corporales. Esto es importante porque la NASA quiere enviar a la primera mujer a la Luna, y porque los trajes actuales no se ajustan bien a las mujeres, lo que les causa incomodidad y fatiga. Los nuevos trajes tienen un sistema modular que permite cambiar las piezas según las necesidades de cada astronauta, como el torso, los brazos, las piernas y los guantes. De esta manera, se garantiza un mejor ajuste y rendimiento6.
Otra ventaja de los nuevos trajes espaciales es que son más duraderos y fáciles de reparar que los actuales. Los nuevos trajes están hechos de materiales resistentes que pueden soportar temperaturas extremas, desde los -156°C hasta los 121°C, y que pueden evitar el desgaste por la abrasión y el polvo lunar. Además, los nuevos trajes tienen un sistema de diagnóstico que detecta posibles fallas y permite realizar reparaciones rápidas en el espacio. De esta manera, se reduce el riesgo de accidentes y se prolonga la vida útil de los trajes.
Los nuevos trajes espaciales de la NASA son el resultado de años de investigación y desarrollo, y representan un avance significativo para la exploración espacial. Estos trajes permitirán a los astronautas realizar misiones más complejas y ambiciosas, como establecer una base permanente en la Luna y prepararse para el viaje a Marte. Los nuevos trajes también son una muestra de la diversidad y la inclusión que caracterizan a la NASA, ya que están diseñados para hombres y mujeres de diferentes orígenes y culturas. Los nuevos trajes espaciales de la NASA son, en definitiva, una herramienta indispensable para el futuro de la humanidad en el espacio.