El próximo día 6 de julio se celebra en Liège (Bélgica), el AI Song Contest, el Eurovisión de las canciones escritas por inteligencia artificial. España está representada a través de un equipo multidisciplinar de seis artistas, ingenieros, investigadores y músicos que buscan promover la cultura gallega en el ámbito internacional a través de las nuevas tecnologías.
El AI Song Contest fue impulsado en 2020 por la radio y televisión pública neerlandesa VPRO con la supervisión de la Unión Europea de Radiodifusión, el organismo encargado del Festival de Eurovisión.
Esta es la primera ocasión en la que una canción gallega participará en el concurso y, en caso de superar la semifinal en la que vota solo el jurado, Ai-Lalelo competería en la final, ya con los votos del público.
Un homenaje a la tradición
La canción busca homenajear a las mujeres que impulsaron Galicia y su tradición, lengua y cultura. El tema mezcla raíz y modernidad con una base en las cantigas medievales gallegas y un toque futurista gracias, precisamente, al uso de la inteligencia artificial en su composición. El tema, además, busca transmitir la responsabilidad a la ciudadanía para que la identidad y la tradición gallega continúen vivas, según informan sus creadores.
Camille Hédouin (Mounqup), Mónica de Nut y Eva e Xandre Outeiro ponen voz a esta canción que narra la historia de una costurera, una mujer gallega de finales del siglo XIX quien, debido a la situación socioeconómica de la época, compagina su oficio artesanal con las labores domésticas y del campo. El tema explica la situación de la mujer en las distintas estaciones del año, con un personaje cada vez más oscuro hasta llegar a una especie de aquelarre.
El equipo lleva el nombre de Ana María Prieto, un homenaje a la primera mujer programadora informática gallega. El grupo de trabajo está formado por el tecnólogo en machine learning y redes neuronales Juan Alonso; la doctora en Composición en IA y compositora de Elisa y Marcela de Isabel Coixet, Sofía Oriana; el productor de bandas sonoras y músico en el Projeto Trépia, Xandre Outeiro; el doctor en Telecomunicaciones y músico y compositor David Santos; la artista digital responsable de los visuales de Tanxugueiras en el Benidorm Fest Marta Verde; y el responsable creativo de Cecubo Group, Joel Cava.
¿Cómo fue el proceso creativo?
El proceso de composición duró cuatro meses. El primer paso fue lograr que el ordenador aprendiese a hablar gallego y a componer una copla a partir de 400 cantigas del archivo digital Volai-vai.
La máquina generó los primeros versos de la letra con una temática como hilo argumental: la costurera en las diferentes estaciones del año, y en este aspecto solo fue preciso corregir alguna falta de ortografía y adaptar alguna frase.
La melodía está hecha a partir de la copla popular A Costureira, con la que el propio ordenador generó diferentes líneas melódicas con Google Magenta. La música, por otro lado, se compuso mediante la grabación de instrumentos y utensilios de labranza que se procesaron por el sistema DDSP, consiguiendo la zanfona, la pandereta, el bombo, el sacho, el plato, la sartén y la lata de forma artificial.
Las voces, el bajo y el arpa de boca al natural se añadieron en la fase final, en la que también se efectuó el procesamiento de audio con algoritmos. El videoclip de la canción también se hizo con inteligencia artificial, reinterpretando una selección de escenas típicas gallegas.
